Mucho se ha hablado de los embates económicos generados por la pandemia del SARS-CoV-2 desde su aparición en China a finales de 2019. Ciertamente, el impacto ha sido notable en todo el mundo, dejando en evidencia la fragilidad de la mayoría de los países en materia económica ante eventos de esta naturaleza.

En Latinoamérica no ha sido distinto, el sub continente americano siempre se ha caracterizado por tener un volumen de importación de mercancías mucho más elevado que de exportación de productos hacia otros continentes. Sin embargo, a través de un informe presentado por la Organización Mundial del Comercio (WTO), conjuntamente con el Centro de Comercio Internacional (ITC) y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), en el primer trimestre del 2021, el comercio mundial de mercancías tuvo un incremento del 2.3% con respecto al último trimestre de 2020, liderado por Asia con un aumento de 7.8% en sus exportaciones gracias a la recuperación de la demanda de consumibles en el resto del mundo, pero en el caso del resto de los continentes, el crecimiento fue plano o negativo. Para América del Sur y Central, se calcula una incipiente recuperación del 0.2%.

En el caso de las importaciones, Latinoamérica reportó un crecimiento del 7%, siendo la región con mayor volumen de demanda de mercancías en el mundo durante el primer semestre de 2021, mientras, un dato bastante relevante, el mercado europeo resintió la actividad importadora con un decrecimiento de -1.6%.

Oportunidades de exportación hacia América Latina desde Venezuela

Ante este panorama, las perspectivas para exportación de productos dentro de la región suponen una gran oportunidad para las empresas productoras en Venezuela. La demanda de mercancías dentro de Latinoamérica se ha hecho más visible y la necesidad de satisfacer estos mercados, disminuidos por la crisis generada por el COVID-19, permiten el impulso necesario para reactivar la actividad productiva y exportadora del país hacia un mercado ávido de productos y servicios.

A pesar de ser una de las regiones más afectadas y de más retraso en los planes de vacunación, las autoridades de nuestros países, han empezado a mostrar flexibilización en sus planes de confinamiento, lo que ha permitido reanimar la producción y el intercambio comercial entre las naciones. Con notables diferencias entre las economías de cada país, a medida que transcurran los procesos de inmunización de la población, irá recuperándose el nivel de producción de la región.

Mientras tanto, la apuesta por el mercado latinoamericano se muestra apetecible, sobre todo, cuando el mercado europeo ha mostrado un retroceso drástico en el volumen de importación de mercancías. Aunado a esto, los fletes hacia destinos más lejanos y la crisis de contenedores de carga que actualmente sigue generando problemas en la distribución de las mercancías hace que la exportación marítima transoceánica, por los momentos, sea menos rentable.

Ingresar a estos mercados, en este momento, ofrece amplias ventajas competitivas en comparación de otras regiones que, quizás, son más grandes y desarrolladas, pero también con más competencia y regulaciones, además, en algunos casos, con demanda de bienes contraídas.

Ante esta coyuntura, es importante conocer alternativas en cadenas logísticas que ofrezcan y garanticen la efectividad del traslado de mercancías dentro de nuestro continente. Clover Internacional ofrece a todos los sectores productivos del país, opciones de servicios y asesoría de exportación marítima hacia distintos destinos dentro de la región. Exportar en Latinoamérica es una oportunidad real y en Clover te ofrecemos soluciones con asesoría especializada para comenzar tus negocios de la manera adecuada en la región.

Latinoamérica no esperara mucho por tu negocio, el momento es ahora.